No vuelvo a incidir en la importancia de incorporar las legumbres a nuestra dieta habitual, ¿no? Acordaos, hay que comerlas 2 o 3 veces a la semana. Y no es tan aburrido, hay muchísimas maneras de prepararlas, y en esta ocasión, vamos a gratinarlas y acompañarlas con una deliciosa morcilla de piñones. Es de Aragón, de hecho me traje unas cuantas de Zaragoza, y en mi opinión, es incluso mejor que la de Burgos.
Ingredientes (para 2):
- 120 gr de alubias blancas
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 2 zanahorias medianas
- 2 hojas de laurel
- 2 clavos
- 6 granos de pimienta negra
- 200 ml de tomate triturado natural
- 1 ramillete de hierbas aromáticas
- 1 morcilla de piñones mediana
- 80 gr de queso para gratinar
- Aceite de oliva
- 1 cucharadita de sal (puede que algo más)
- 1 cucharadita de azúcar
Elaboración:
Empezamos por poner las alubias en remojo la víspera.
Ponemos a calentar un poco de aceite en la olla a presión y cuando esté, echamos los dientes de ajo triturados. Dejamos que se empiecen a dorar y añadimos la zanahoria pelada y en trozos y la cebolla con los clavos clavados (valga la redundancia ;D). Rehogamos un par de minutos y agregamos el tomate triturado, el azúcar y la sal. Dejamos otros dos minutos e incorporamos las alubias, el laurel, la pimienta y las hierbas aromáticas.
Las cubrimos con agua fría hasta unos 3 dedos por encima, cerramos la olla y dejamos que se cocinen unos 22' desde que haya subido la pesa. Cuando haya bajado la presión abrimos, retiramos las hierbas aromáticas y las hojas de laurel y trituramos la zanahoria y la cebolla sin los clavos. Incorporamos el puré a la cazuela y si vemos que aún están demasiado caldosas les damos un hervor fuerte durante unos pocos minutos para que se evapore el agua.
Ahora cortamos la morcilla en rodajas gruesas, de 1,5 cm más o menos y las hacemos a la plancha por ambos lados. Cuando estén crujientes podemos retirarlas del fuego.
Entonces, colocamos las alubias, procurando no echar mucho caldo, en dos fuentes individuales de barro o de cualquier material refractario. Repartimos la morcilla entre ambas y espolvoreamos con abundante queso. Entonces las metemos en el horno precalentado con el grill encendido durante 5-10' hasta que se hayan gratinado y ¡listo!
Pequeños consejos:
Como el tiempo de cocción de las alubias depende mucho del tipo de alubia, de si son aguas duras o blandas y del tipo de olla a presión, hay que tener cuidado con que queden bien hechas pero sin deshacerse. Si hay algún truco para esto, me temo que no lo conozco.
Y al meterlas al horno, procurad que no tengan demasiado caldo, pues de lo contrario el queso se hundirá y no se gratinará.
Al gusto:
Podéis utilizar más verduras, como pimiento, puerro... y también quitar o añadir las especias que queráis.
Catástrofe de hoy:
Mmm... Como hace tiempo que la preparé ni me acuerdo, pero estoy bastante segura de que no ocurrió nada.
el dia que las vuelvas a hacer me invitas virtualmente a comer porque deben estar de muerte y ¡con morcilla! que buena... besos
ResponderEliminarEso está hecho ;D
ResponderEliminar¡Gracias por el comentario! Estos detalles son los que alegran el día. La verdad es que las puse en esa cazuela para las fotos y me dije 'no me lo voy a comer todo, que es demasiado', pero no puede parar, eso sí, para hacer la digestión después... tela.