Aunque sea yo quien está escribiendo, la experta en este tema es mi hermana, pues desde que le regalamos la máquina de pasta tengo la impresión de que no ha comido otra cosa más que pasta. Es broma, creo que también le ha dado al puré. Así que esta vez le ha tocado a ella hacer de chef, eso sí, la que se ha manchado las manos, una servidora.
La pasta en sí es fácil y rápida de hacer, y estirarla y cortarla, con máquina también, pero no es imprescindible. Si no tenéis máquina la podéis estirar con el rodillo y cortarla como os plazca, según lo que queráis hacer. Hombre, no os digo que os pongáis a cortar espaguetis, pero unas láminas para lasaña, o cuadraditos para raviolis no lleva mucho tiempo.
Lo mejor de todo es que podéis hacerla integral, de tinta de calamar, de espinacas... Ya os contaré cómo.
Ingredientes (para 4-6 personas):
- 300 gr de harina de fuerza
- 3 huevos
- Una chorretada de aceite
- Agua (si tenéis suero de leche mejor)
Elaboración:
Batimos 2 huevos, la yema del tercero y el aceite. Entonces hacemos un volcán con la harina y los vertemos en medio. Con la ayuda de una espátula vamos mezclando de fuera a dentro y cuando empieza a coger consistencia lo hacemos con las manos. Añadimos un poco de agua si lo vemos necesario. Tenemos que obtener una bola de masa homogénea que no se nos quede pegada a las manos. Entonces hacemos tres bolitas, las envolvemos en papel film y dejamos reposar en el frigorífico durante 15'.
Pasado este tiempo, estiramos la masa, ya sea con la máquina o con el rodillo y la cortamos. Entonces la ponemos a cocer en abundante agua hirviendo con sal unos 5', la escurrimos y ¡listo!
Pequeños consejos:
Para cocer la pasta, se necesita 1 l de agua por cada 100 gr y si no vais a acompañarla de salsa, es mejor que echéis un poco de aceite para que no se pegue, aunque con la pasta fresca es algo más difícil. Si vais a acompañarla de salsa y habéis echado aceite, lo que ocurrirá es que se formará una película protectora encima que no dejará que se impregne y pasará lo típico de que no se mezcla bien.
Al gusto:
Podéis hacer la pasta de tinta de calamar, de tomate, de espinacas, de remolacha, integral... y ni que hablar del acompañamiento: salsa de tomate, bolognesa, carbonara, con gulas y gambas, de piquillos... Lo que queráis.
Catástrofe de hoy:
Cuando hemos acabado, nos hemos quedado con la impresión de que habíamos hecho comida para dos días, pero en cuanto han llegado nuestros padres han vaciado las fuentes en cuestión de minutos.
[...] siempre que queremos acompañar pasta, unas albóndigas o prácticamente cualquier cosa, recurrimos a la salsa de tomate. ¡Y eso no es [...]
ResponderEliminar[...] receta del este! Se trata de algo similar a lo que nosotros conocemos como raviolis, véase, pasta rellena. Pelmeni es el nombre ruso y en Ucrania reciben el nombre de varenyky. Pero son típicos [...]
ResponderEliminar[...] a escribir por aquí, de modo que he de hacerlo yo. Si bien os conté en la otra entrada sobre pasta fresca, que desde que le habían regalado la máquina de pasta no hacía otra cosa, a mí me ha costado [...]
ResponderEliminar[...] Como ya he dicho antes, dependiendo de si la queréis más o menos líquida, primero, echáis más o menos agua, y al final, la hervís durante más o menos tiempo. Como yo la he hecho para acompañar unas albóndigas de carne, que normalmente son bastante densas ya de por sí, he preferido hacer una salsa más ligerita, pero como me ha sobrado bastante, probablemente le pegaré un buen hervor para acompañar un buen plato de pasta casera. [...]
ResponderEliminar[...] es más que abrir un paquete y echarlo a la cazuela, pero no es mucho lo que se tarda en hacer pasta fresca en casa, y huelga decir que es mucho más [...]
ResponderEliminar