Teóricamente, la diferencia entre muffins, magdalenas y cupcakes es la siguiente:
- Magdalenas: se baten bastante para meter mucho aire y tienen copete (que crecen hacia arriba, como con sombrerito).
- Muffins: son más planos, con forma de seta y apenas se baten para no meter mucho aire.
- Cupcakes: son pasteles individuales que se rellenan, decoran...
Claro que luego, si nos vamos al supermercado, daremos con magdalenas que tendrán más o menos copete, y si pasamos por un Starbucks, nos encontraremos con unos muffins enormes y con bastante copete. En cuanto a los cupcakes sí que no hay mayor dilema.
Lo cierto que si llegáis a preguntarme a mí antes de leer nada de esto, os habría dicho que las magdalenas son como bizcochos simples en cápsulas de papel rizadas, que los muffins son magdalenas enormes que se suelen hacer de sabores y así, y que los cupcakes son magdalenas decoradas, cosa que a simple vista no parece muy desencaminada, pero bueno.
Pues nada, aquí os dejo con la receta de muffins de café y caramelo. Iba a llamarlos Werther's muffins, pero al final lo he desechado, pues resulta más útil a la hora de buscar poner simplemente los ingredientes principales.
Ingredientes (para 5 muffins):
Para los muffins:
- 150 gr de harina
- 100 gr de azúcar
- 60 ml de aceite de girasol
- 1 yogur griego
- 1 huevo
- 1 cucharadita y 1/4 de levadura
- Una pizca de sal
- Unas gotas de aroma de café (*)
(*) Si no tenéis aroma de café, podéis añadir una cucharada de café soluble.
Para el caramelo:
- 60 gr de azúcar
- 1 cucharada y 1/2 de agua
- Unas gotas de zumo de limón
Elaboración:
Para hacer la masa de muffins:
Tamizamos la harina, la levadura y la sal (y el café soluble si no tenemos aroma) en un bol.
Aparte batimos el huevo con el azúcar y luego añadimos el aceite, el yogur y el aroma de café. Batimos de nuevo.
Hacemos un agujero en medio de la harina y vertemos la mezcla líquida. Removemos con una espátula hasta que todo esté bien integrado y llenamos los moldes de muffins casi hasta arriba.
Para hacer el caramelo:
Preparamos los muffins:
Repartimos casi todo el caramelo entre los muffins. Después con la ayuda de una cuchara removemos para mezclarlo, y como al enfriarse se endurece, lo rompemos sin miedo. El caramelo restante lo ponemos por encima para decorar.
Los horneamos a 190ºC durante 25 minutos y ¡listo!
Pequeños consejos:
Hay aromas que no dan mucho sabor, de modo que no escatiméis, pero como normalmente son algo caros, casi mejor os recomiendo usar café soluble.
No dejéis que el caramelo se oscurezca demasiado, pues lo más probable es que se os queme y huele realmente mal. ¡Y acordaos de no remover una vez empiece a burbujear!
Luego, para enfriarlos, lo mejor es que apaguéis el horno, lo abráis un poco y los dejéis 5-10 minutos ahí. Después los pasáis a una rejilla para que terminen de enfriarse del todo.
Al gusto:
Podéis prescindir de el café y hacerlos tan sólo de caramelo. Están espectaculares, en serio. Y si tenéis problemas de tensión alta, lo que podéis hacer es utilizar descafeinado.
Catástrofe de hoy:
¡Por fin! ¡Una catástrofe digna de mención y de foto! Casi me he alegrado y todo, aunque sólo fuera por animar un poco esta sección.
El caso es que he puesto a hacer bastante caramelo, demasiado y... (redoble de tambores...) ¡se me ha quemado! Estaba fregando cacharros y se me ha ido, como de costumbre. Por desgracia, lo que me ha avisado es el horrendo aroma a azúcar quemado, creedme, es asqueroso. Y para despegarlo... tela. Ahí lo tenéis, enfriándose en la fregadera. He probado un poquito a ver qué tal sabía, pero mejor no lo hagáis.
Y además, casi no sabían a café, lo cual no me ha importado demasiado porque lo hacía más que nada por Victor, pero he usado casi medio bote de esencia de café Lorann ¡y de barato nada!
[...] mejor es no usar la batidora de varillas para hacer muffins, pues como expliqué en la entrada de muffins de café y caramelo, la diferencia entre estos y las magdalenas, es que a los muffins no hay que meterles mucho aire [...]
ResponderEliminarespero hacerlos gracias
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