Galletas bebé de mantequilla, miel y limón

¡Va a haber un nuevo miembro en la familia! Hay que esperar unos mesecicos pero tengo unas ganas... que no os podéis ni imaginar, ¡con lo que me gustan los niños!

Así que cuando me pasé por una tienda a comprar cosillas para cupcakes y así, cuando vi los cortapastas en forma de carrito de bebé y de biberón me emocioné; y menos mal que tuve algo de autocontrol y no me llevé también el patuco y el body, aunque no digo que no vayan a caer dentro de poco. No le haré patucos de ganchillo al niño (o niña), pero los míos podrá comérselos.

De todos modos hasta que le salgan dientes, voy a tener tiempo suficiente para ir perfeccionando la técnica del glaseado o desarrollando un poco más de paciencia. Cuando tenga una tarde libre para no hacer nada sino una tonelada de galletas y la paz interior suficiente para hacer el trabajo de chinos que supone en ocasiones decorarlas, os explicaré también cómo preparar glasa real y glasa a punto de escribir. Es muy sencillo, pero hasta ahora siempre que las he hecho se me ha olvidado sacar la foto del final de el proceso, con lo cual no sirve de mucho. En cualquier caso, es algo más decorativo que otra cosa, con lo cual también es prescindible.

Como la glasa se acaba endureciendo, lo mejor es que las galletas no sean muy secas, y lo ideal es hacerlas prácticamente iguales a las pastas de té tradicionales, claro que siempre podemos darles el toque que más nos guste: yo esta vez limón y miel.

Ingredientes (unas 20 galletas):

- 100 gr de mantequilla

- 220 gr de harina (un poco más)

- 70 gr de azúcar

- 1 yema de huevo L

- 3 cucharadas de miel

- El zumo de 1/2 limón

- La ralladura de 1/2 limón

- Glasa para decorar (algo fluida)

Elaboración:

Para hacer las galletas:

Batimos la mantequilla en pomada con el azúcar, después añadimos la yema, la miel, el zumo y la ralladura de limón y volvemos a batir.

Después añadimos la harina tamizada poco a poco y mezclamos con una espátula. cuando la masa empieza a adquirir cierta consistencia, pasamos a amasar con las manos. Dejamos de añadir harina cuando tenemos una bola de masa homogénea que no se pega a las manos.

La envolvemos en papel film y la dejamos reposar en el frigorífico durante al menos 1 hora. Pasado este tiempo, la volvemos a amasar un poco hasta que se vuelve manejable y la estiramos con un rodillo sobre una superficie limpia y un poco enharinada, hasta dejarla con un espesor de entre 1/2 y 1 cm. Cortamos las galletas con un cortapastas en forma de carrito de bebé y otro de biberón, y las horneamos a 180ºC durante 10 minutos o hasta que justo empiecen a coger color.

Cuando estén hechas las sacamos del horno y las dejamos enfriar sobre una rejilla.

Para decorar las galletas:

Reservamos parte de la glasa blanca y teñimos el resto: la mitad de rosa y la otra mitad de azul.

Con la blanca pintamos la parte inferior de los biberones y la superior de rosa.

Los carritos los pintamos de azul y dibujamos las ruedas con rosa. Les haremos también un encaje y unos lunares rosas cuando la glasa azul se haya secado. Para hacer el encaje pintamos una línea y luego, con un palillo hacemos los volantes.

Los dejamos secar al aire durante al menos 1/2 hora y ¡listo!

Pequeños consejos:

Cuando hagáis galletas de este tipo, que son como pastas de té, es mejor que las hagáis gruesas para que no se sequen al hornear, y también es importante que no dejéis que lleguen a dorarse por el mismo motivo.

A la hora de decorar, para no excederos con la glasa, dibujad primero los bordes sin llegar a los extremos de la galleta, y no rellenéis del todo el medio, sino que con ayuda de un palillo lo vais esparciendo hasta llenar los huecos.

Y si tenéis algo de prisa en que se seque la glasa, encendéis el horno a 50-60ºC y las metéis ahí unos 20 minutos, veréis qué rápido se seca.

Al gusto:

Obviamente, podéis hacer las galletas del sabor que queráis manteniendo las proporciones adecuadas y las recomendaciones en cuanto al reposo, grosor y horneado, y a la hora de decorar lo mismo: formas, colores...

Catástrofe de hoy:

Uno de los carritos se me ha hundido al hornearlo, y creo que ha sido porque al amasar me he dejado alguna burbuja de aire dentro.

Y al decorar me ha echado una mano cierto sujeto, ¿os imagináis lo que ha pasado? ¡Pues no lo ha hecho tan mal! Eso sí, se nota cuáles son las suyas y cuáles las mías.

Fotos para abrir boca:[gallery link="file" ids="3960,3963,3958"]